En la opinión de
DR. H.C. DANIEL VALLES JEFE DE LA UNIDAD DE COMUNICACIÓN SOCIAL DE LA J+¡FELIZ NUEVO DÍA!
Se termina el año y con él, avanzamos en
la segunda década del SXXI.
Deseamos en la J+ salud, trabajo,
bienestar familiar, personal y determinación para todos nuestros usuarios.
El destino uno ha de forjárselo. La vida
no depende de la suerte. Es con base en determinación y disciplina, esfuerzo y
dedicación que uno conquista paulatinamente conforme cumple uno sus metas.
Hay que esforzarse ser muy valiente. Es
la recomendación divina para la vida. Quienes tenemos FE, lo sabemos y lo
entendemos. Y quienes no, estarán de acuerdo con la premisa para la vida.
2023 ha sido un año en que en la J+
hemos invertido en obras como nunca antes. Y seguiremos haciendo lo mismo.
En el 2024, la esperanza y la fe se
convierten en artículos de primera necesidad. No como panaceas. Sino como
realidades. No como ayos o como refugio de débiles personas, sino como
verdaderas anclas y bases reales que sostienen nuestra vida para que no navegue
a la deriva. Además, están de regreso a nivel mundial.
La esperanza, virtud que otorga visión a
quien la tiene. Es como el viento que al pegar en las velas de nuestro barco,
lo empuja para llevarlo a donde esperamos llegar. Es la fuerza que nos motiva a
seguir a pesar de que las cosas no salgan como queremos, por los motivos que
sean.
La fe, también otorga una visión, pero
de diferente consistencia. Ya que entre más crezca y se perfeccione, se pula y
se arraigue en uno mismo, otorga certidumbre y confianza. Nos lleva y nos
dirige hacia donde se encuentran las respuestas que en verdad necesitamos. En
mi caso particular, a la sabiduría pragmática de Mi Creador.
“Todo lo bueno y perfecto que se nos da,
viene de arriba, de Dios, que creó los astros del cielo. Siempre me decía mi
madre.
Y así, contando con estas virtudes, la
esperanza y la fe, la vida del ser humano se hace más llevadera. Más tolerable.
Más completa. No son las únicas, existen muchas más, pero son de las más
importantes.
El amor será un derivado de estas dos. Y
todo se convierte en sostén principal del diario vivir de cada persona que los
cultiva. Y vaya que hoy necesitamos de amor, como decían Los Beatles.
No se requiere de “varitas mágicas” para
lograr metas. Se necesita de la visión y la determinación que dan la esperanza
y la fe. De trabajo y disciplina. De buenos deseos, que no buenas “vibras”.
Estimados usuarios, a nombre de todos
mis compañeros en la J+ les deseamos mucha esperanza, mucha fe y que el amor
fluya a través de cada decisión que tomemos basados en estos elementos.
Que el año que inicia sea determinante
en el crecimiento y progreso de todos y cada uno de ustedes. Así, dentro de
algunos años podremos voltear a ver el fin de la segunda década del SXXI y
podremos estar satisfechos. Pues entendiendo también, que todo lo que
sembremos, es lo mismo que cosecharemos.
Feliz Año Nuevo, Feliz Nuevo día.
dvalles@jmasjuarez.gob.mx